“La vida es un viaje, no un destino”.
Con esta cita, el escritor, filósofo y poeta estadounidense, Ralph Waldo Emerson, pretende destacar la importancia de disfrutar del camino y de no enfocarnos exclusivamente en nuestro destino final. Y esto es aplicable para todo; para un proyecto, para un trabajo, para una formación, en nuestras relaciones personales y sociales, en general, para cualquier situación y/o estado que nos esté tocando vivir.
Todos sabemos que en el viaje de la vida van a existir altibajos, pero también debemos entender que cada momento es una oportunidad para aprender y para crecer. El estar presente en cada vivencia y ser capaces de apreciar lo que nos rodea (porque siempre hay algo pequeño/grande, poco/mucho), nos permitirá tener una perspectiva más positiva y gratificante.
En el relato de nuestra vida, colocaremos puntos y seguidos, puntos y aparte. Disfrutemos y aprendamos de cada uno de ellos para que cuando se acerque o llegue el momento de escribir punto y final, los recuerdos de nuestra vida nos dibujen una entrañable sonrisa. Vivamos 😉