Así hizo, el tenor polaco Leszek Swidzinnski de la ópera Real de Polonia y el coro de médicos Medicantus, que conmovieron al personal sanitario y pacientes cuando aparecieron en un hospital de Varsovia e hicieron la interpretación de Nessun Dorma (¨Que nadie duerma”) de Puccini.
“… Y de repente, un día cualquiera, escuchas una música celestial que no sabes de donde viene, y la buscas … espontáneamente, abres la ventana y ves, como alguien te mira, y te habla desde su mejor forma, desde su corazón. Conectas con esa maravilla que se apodera de ti, desde lo más profundo de tu ser y tu expresión cambia. La ternura y el asombro te abrazan, y sientes de manera muy intensa. Tus ojos se cierran, y las lágrimas se asoman, algunas salen y otras se quedan. Y cuando tu cuerpo y tu alma están entregados, de pronto, otras personas se unen y también te dan los mejor de ellas. Entonces, el bello se pone de punta y desaparece, por un momento, ese cansancio y ese dolor que te atormentan. Es tan extraordinaria esa sensación que te haces grande y quieres dar lo mejor de ti a los demás porque el regalo que acabas de recibir es solemne y de alguna manera, hace que vuelvas a tener esa ilusión por compartir, por vivir…”
Todos tenemos algo que nos hace especiales. Regala un poquito de ti a los demás, a ellos les harás felices, pero tú sentirás lo buena persona que eres 😉
A pesar de que no tengo mucha cultura musical me gusta escucharla , me relaja, me motiva y sobre todo me da paz me alegra el corazón y mi alma se ilumina
Maravilloso. La música siempre nos da aquello que en cada momento necesitamos